Mostrando las entradas con la etiqueta Arquitectura. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Arquitectura. Mostrar todas las entradas

domingo, 1 de julio de 2018

Cima 7: Viva diferente





Entre los años 60 y 90, en Caracas se realizaron edificios emblemáticos por su diseño, ubicación, tecnología y comodidades. Obras que todavía hoy demuestran, con prestancia y solidez, la atemporalidad de las buenas ideas convertidas en monumentos de admiración para quienes aprecian la creatividad de sus arquitectos y el empeño de superación de sus constructores.
Sin embargo, en los últimos años éste tipo de proyectos han prácticamente desaparecido de la ciudad, y aquellos que otrora conformaban símbolos anhelados hoy sufren un galopante deterioro como consecuencia del éxodo de sus copropietarios, la falta de mano de obra calificada, la disminución acelerada de su valor y la escasez de los insumos importados necesarios para su preservación.
La modernización tecnológica y el uso de materiales inteligentes, de acuerdo a los nuevos estándares mundiales de construcción, sólo se ve en algunos inmuebles unifamiliares realizados por quienes prefieren tener privacidad, evitando los grandes problemas que hoy plantea la propiedad horizontal multifamiliar.
Según cifras de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, más del 90% de las transacciones del mercado inmobiliario durante los últimos treinta años está conformado por inmuebles multifamiliares; suficiente evidencia de que no sólo las preferencias de los constructores se han centrado allí, sino también de los mismos compradores que por razones pragmáticas, de economía de espacios y de seguridad, han simpatizado más con los apartamentos.

Confort y tecnología



Pensando en los tiempos complejos, de éxodo, retorno, laberintos y necesidad, Corporación SMA apoyó la realización de un nuevo concepto de vivienda multifamiliar donde la seguridad, la tecnología, la autosuficiencia de servicios, las áreas de esparcimiento, recreación y entrenamiento físico, sumado a servicios condominiales de estilo hotelero, convivan en armonía; mientras todos los miembros de la familia desempeñan sus actividades cotidianas con privacidad, comodidad, tranquilidad y amplitud, con un uso eficiente y ecológico de los espacios; cuya ubicación sea cercana a todos los servicios, pero protegida del ruido, el tráfico y la inseguridad. Viviendas cómodas, con instalaciones recreativas para que las familias y sus amigos tengan un espacio de resguardo, ergonomía y esparcimiento, que conformen su hábitat de equilibrio.



Según César García Urbano Taylor, el Proyecto Cima 7, con casi 5.000 m2 de construcción, está basado en toda ésta filosofía de desarrollo. Modernidad, baja densidad, insuperables vistas, cercanía con todos los servicios y principales vías, domótica e inmótica de última generación, sistemas totales de seguridad, protección y recreación, acabados, áreas, paisajismo y estructuras destinadas a diseñar inmuebles que respondan a los requerimientos de toda índole del mercado venezolano actual para éste tipo de edificación.



Ese es el caso de CIMA 7. Su ubicación sin densidad, vistas, cercanía, tecnología, autosuficiencia de funcionamiento y operación, servicio y estructuración del condominio con el objeto de fijar normas que forman parte de la decisión de vivir allí, con el mantenimiento, modernización y preservación verdadera de los espacios en el tiempo… la elección de los copropietarios y la configuración de un esquema de seguridad total en una perfecta correlación de espacios, generan una filosofía de vida que se elige no por su precio; sino por la paz, orden y certeza que otorgará a las seis familias que en definitiva vivan en él un verdadero templo de bienestar.



Este concepto combina elementos que compiten con los mejores desarrollos internacionales de su estilo, en cuanto a confort y tecnología, dirigido al cliente que valora lo que significa vivir diferente, que le da mayor peso a lo cualitativo que lo cuantitativo. Se está planteando su construcción también en algunas capitales de América Latina, adaptándola a los usos y costumbres del lugar.



CIMA 7 se encuentra en fase de permisología, concentrando su formulación de venta de acuerdo a la filosofía que le dio origen.

Con información ce Cápsula Informativa

sábado, 29 de octubre de 2016

TORRE SMA


Entre las calles París y Mucuchíes de la urbanización Las Mercedes, tuve la fortuna de desarrollar una parcela en esquina de 2.027,33 m2 con un proyecto de 20.000 m2 de construcción.
En el terreno, al no tener grandes visuales sobre la trama de la urbanización o de la ciudad, tomé como punto de partida del diseño al nivel peatonal y vehicular, buscando una fuerte y clara imagen.
Teniendo en cuenta la ordenanza muy rígida de la urbanización, un nivel freático muy alto y una necesidad fuerte de puestos de estacionamientos desarrollé un concepto de volumetría integral.
En el concepto busco que el edificio tenga una visión total y no fraccionada, producto de la diferencia entre los estacionamientos elevados y los niveles de oficinas. Desarrollo una especie de piel en vidrio con una forma atractiva que envuelve el edificio, haciendo que se integren los diferentes niveles del mismo.
Se crea una edificación con una imagen que nos da una fuerte identidad. Siempre se buscó una volumetría sencilla, limpia, clara y de fácil reconocimiento. Aunque el elemento fuerte de vidrio cae y responde a la condición de esquina, la entrada principal se produce sobre la calle París; este acceso se produce entre una abertura de la piel envolvente y la doble altura que aparece al receder la placa de la mezzanina.
En este nivel de planta baja se encuentra el hall principal de acceso a la circulación vertical y dos grandes locales comerciales con sus respectivas mezzaninas. Se aprovecha el hecho de esquina para producir una entrada a los dos niveles de sótanos y otra para los tres niveles de estacionamientos elevados.
La planta tipo es de forma sencilla para lograr aprovechar al máximo los metros cuadrados vendibles. Se basa en una circulación central con dos escaleras de emergencia en los extremos, y de esta forma se logra el mayor número de oficinas con metrajes bajos para su fácil comercialización.
f2-torre-sma
f3-torre-sma
f4-torre-sma
f5-torre-sma
f6-torre-sma
f7-torre-sma
f8-torre-sma
f9-torre-sma
p1-torre-sma-plantas
p2-torre-sma-cortes
Ficha Técnica
Arquitectura: Arq. Jorge Arreaza C.
jrarreaza@gmail.com
Estructura: Ing. Manuel Rodríguez
Instalaciones eléctricas: Ing. Jorge Díaz
Instalaciones sanitarias: Arq. Rafael Aguilera / Arq. Rafael Santana
Instalaciones contra incendio y ventilación mecánica: Ing. Matilde Peñaranda
Area de terreno: 2.027,33 m2
Area de construcción: 20.000 m2
Fotografías: Andrew Alvarez
Ubicación: Calles París y Mucuchíes, Las Mercedes, Caracas, Venezuela

f11-torre-sma-maqueta
f10-torre-sma-render

“La Torre SMA, durante sus inicios, experimentó complejos momentos, producto de la Intervención Nacional Inmobiliaria; pues el mercado sufrió una fuerte contracción por la pérdida de confianza en el sector. La desesperanza y el miedo invadieron a los inversionistas; por cuanto no había certeza de ningún tipo en el destino de las inversiones en metros cuadrados, aunado al hecho de que todos los materiales estaban siendo destinados a la Misión Vivienda. El panorama era difuso. Pocos tuvieron la fe y fortaleza para creer en ese momento.
Sin embargo, siendo en ese instante la única obra de oficinas iniciándose en Las Mercedes, los propietarios del terreno aplicaron el acertado y atractivo incentivo de precio fijo, sin ajuste de ninguna naturaleza, por lo cual pudieron realizar ventas en la época de mayor recesión inmobiliaria de la historia venezolana, combinando el financiamiento bancario para cubrir los momentos de falta de liquidez. Parecía imposible vender pero se captó la atención del mercado, disminuyendo sustancialmente la rentabilidad proyectada, ante la sorpresa y conmoción de las circunstancias.
El producto se mejoró creando una novedosa fórmula. Se ofertaron una serie de acabados y tecnología sin precedente en un proyecto con inmejorable ubicación y con un precio extraordinario, lo que permitió derrotar el pesimismo que aquejaba al mercado.
En pocos meses, al finalizar el 2012, se percibía la calidad del producto final y los propietarios pagaban puntualmente para evitar retrasos. Para 2014 la torre estaba culminada, con sus permisos y comenzaba a ocuparse.
Los artífices de esto fueron aquellos que años antes, vislumbraron en un predio conformado por casas donde nadie veía sino “problemas inquilinarios imposibles de resolver”, la realidad que hoy existe. Desde la adquisición del terreno, el desalojo de inquilinos, la Intervención Nacional y los acontecimientos que todos hemos vivido, la Torre SMA se logró edificar por el compromiso verdadero de sus realizadores: los más de 50 copropietarios que no dudaron en invertir y confiar en los aventureros, como se autodenominan: Alejandro Rivero Romano,  Marvia Carvajal, Grecia Pinto, Valerio Javier Rivero, César García Urbano Taylor, Carlos Galia y Francisco Astudillo, acompañados de decenas de obreros, contratistas y proveedores que apoyaron ésta idea que hoy, gracias a su esfuerzo, confianza y rescate, conforma un edificio icónico ideado por el Arq. Jorge Arreaza; todos miembros, más que de una empresa, de un equipo de soñadores…”
César García Urbano Taylor

Artículo publicado en la revista entre rayas No. 114, dedicada a Arquitectura de Oficinas VIII. Julio-agosto 2016.

jueves, 28 de abril de 2016

En el 2019

NUEVA YORK TENDRÁ SU 
PARQUE FLOTANTE



Estados Unidos ⁄ Pier55   es el nombre 
de este parque futurista que se 
encontrará al borde del río Hudson en 
Manhattan.

Un nuevo parque flotante verá la luz 
en Manhattan, Nueva York. La 
construcción a cargo de la firma de 
arquitectos Heatherwick Studio recibió 
el visto bueno de la Corte Suprema de 
Nueva York luego de superar algunos 
problemas legales.

El parque, denominado Pier55, estará 
flotando sobre el río Hudson gracias a 
unos pilotes con forma de pétalos que 
están sumergidos bajo el agua. La 
construcción de este proyecto, financiado 
por la familia Diller -von Furstenberg-, 
se vio detenida hace unos meses 
por las demandas de diversas 
organizaciones ambientales que 
se opusieron al nuevo parque por los 
efectos que causaría en el río, recoge 
Architect’s Newspaper.

Levantado sobre 300 columnas de 
hormigón, este parque funcionará 
como escenario de espectáculos al 
aire libre y como protección frente a 
tormentas. Incluirá hasta un anfiteatro 
de 800 asientos. Se prevé que esté 
finalizado en el 2019.


El parque estará flotando sobre el río Hudson de Nueva York y contará con grandes escenarios para la recreación como un anfiteatro.(Foto:heatherwick.com)

viernes, 8 de abril de 2016

Renacer urbano de Las Mercedes





La urbanización Las Mercedes, ubicada al norte del Municipio Baruta, y que nació como una zona netamente residencial en la década de los cincuenta, vuelve a ser considerada por los promotores urbanos como un sector estratégico para conformar un gran centro empleador, comercial y turístico que sea un punto de referencia para los visitantes de la ciudad.

Y es que con tan solo pasar por lo que se considera el centro de Las Mercedes (avenida principal y calles paralelas) se pueden observar las nuevas construcciones de edificios de oficinas y locales comerciales, cuyos desarrollos abarcan hasta dos parcelas y la altura supera los cinco pisos que era una de las limitantes que tenían los promotores en los años 80. 


Actualmente están en construcción 25 desarrollos empresariales, comerciales y de residencias en todo el ámbito geográfico de Las Mercedes. Sin embargo, se estima que esta cifra pueda aumentar a finales de este año, según afirman Carmen Elisa Hernández, directora general de la alcaldía de Baruta y María Carmen Juquera, directora de Ingeniería Municipal.



Indicaron que estos cambios se vienen observando desde hace tres años, a raíz de la última reforma de la ordenanza de zonificación que se hizo en 2011. "Hay una nueva reexplosión de construcción en Las Mercedes. Esta zona ha venido sufriendo cambios, nació como urbanización residencial en los años 50 y a partir de los años 70 a 80 comenzó el auge de comercial. Hoy en día es el gran centro gastronómico y comercial del municipio Baruta", indicó la directora general. 



Por su parte, Roberto Marrero, director de Las Mercedes, quien es el enlace entre los promotores y la alcaldía, reconoció que el aumento de los proyectos sobre todo en el área empresarial se debe a que la ordenanza otorga mayores incentivos. Indicó que para los bancos que se instalen en la zona ordenanza les exonera de impuestos municipales por dos años. Además, a los desarrolladores se les permite un mejor aprovechamiento de las parcelas, es decir muchos más metros de construcción y se aumentó el límite de altura de las edificaciones que era otra de las limitantes. Ahora pueden tener hasta siete pisos, sin contar los niveles de estacionamiento.



En las oficinas de Ingeniería Municipal un promedio de diez personas acuden para hacer consultas sobre proyectos en Las Mercedes en los dos días de atención que tiene esta dependencia. 



Cesar García Urbano, quien es promotor inmobiliario revela que "el negocio en Las Mercedes es la construcción de centros empresariales por ser una zona de fácil acceso y además estamos apostando a la nueva Línea 5 del Metro. Para nosotros esa zona es ahora el centro de Caracas", destaca. 



Por su parte, Carlos Anato, arquitecto que trabaja para el grupo de inversionistas que ejecuta la ampliación del Centro Comercial El Tolón, reconoce que esta es una de las zonas de mayor crecimiento empresarial por ser proyectos los que tienen menos limitaciones que las viviendas. 



Según Marrero los proyectos más importantes son: dos grandes centros empresariales entre las calles Madrid y París; dos sedes financiera (Caribe y Provincial) en la principal y el Toloncito que incluye apartamentos residenciales y la integración del Centro Comercial que es el segundo más grande de la zona.


Los terrenos "raros" hacen furor en Nueva York


FLATIRON. Emplazado en una manzana triangular, fue construido en 1902 por Daniel Burnham.
Estados Unidos ⁄  En la ciudad crecen los desarrollos en lotes irregulares. El Flatiron, uno de los edificios icónicos de la Gran Manzana por su planta triangular, se convirtió en la inspiración de los desarrolladores. 

Nueva York está llena de imitadores. Se expresa en la hilera de típicas casas de mampuesto (conocido como brownstone) del siglo XIX, las formas de la época art déco, las copias del edificio Seagram esparcidas por el centro de Manhattan en los 60 y 70, y las peceras lujosas que se ven mucho actualmente.

Sin embargo, aún cuando es uno de los puntos favoritos de la ciudad, el edificio Flatiron, con su proa cernida sobre Broadway y Madison Square Park, ha sido muy poco imitado. Al menos, hasta ahora, porque los desarrolladores neoyorquinos siempre han preferido apegarse a la cuadrícula. Esto decantó en edificios cuadrados -en ambición tanto como en estética-, pero con el aumento de los costos de la tierra, especialmente en Manhattan, los constructores hace poco comenzaron a mirar lotes más inusuales.

“Los tipos de terrenos que determinaron la forma del Flatiron se han venido evitando porque los interiores son demasiado raros, y por lo tanto difíciles de ubicar en el mercado, señaló Patrice Derrington, director del Centro de Bienes Raíces Urbanos de la Universidad de Columbia. Sin embargo, a medida que aumenta la necesidad, los desarrolladores están prestando atención a estos sitios menos favorables. 

Desde una esquina en el Soho, donde la Avenida de las Américas y la calle Sullivan se cruzan, las posibilidades de encontrar esta clase de lotes es posible. Especialmente desde que en 1925, se creó el camino de la avenida, algo que fue muy criticado pero que terminó definiendo las áreas ahora conocidas como Greenwich Village, Soho y Tribeca. El nuevo trazado dejó sólo los rastros de más de la mitad de los edificios: algunos fueron encerrados, otros demolidos y algunos reemplazados. Incluso unos pocos se convirtieron en estacionamientos y lavaderos de autos. 

En Sullivan 10 hay una torre de ladrillos y vidrios curvos de 16 pisos que se parece a uno de estilo industrial en el vecino barrio de Hudson Square, y forma una cuña de 64 metros. Su arquitecto, Cary Tamarkin, dice que su forma no intenta ser un homenaje al Flatiron. "Obviamente lo conocemos muy bien”, sostiene Tamarkin. “Está a tres cuadras de nuestra oficina, pero no lo llamaría una inspiración. Toda su forma se debe a un modo de implantarse en el terreno”.

El lote del Sullivan es de 28 metros en la parte posterior y unos pocos metros en la parte delantera, con más de 100 metros en el medio. De éstos, cerca de 30 metros se emplearon para crear cuatro casas, mientras que el resto del sitio contiene la torre. Un conjunto de balcones en la parte trasera comparte la forma curvada de la punta, lo que ayuda a que los espacios que sobresalen sean más funcionales. "La curva en la parte delantera es de 6 metros de ancho," afirma Tamarkin. "Puede parecer muy estrecha desde la calle, pero por dentro significa un montón de espacio para jugar."

Además, lo que podría perderse en cuanto a espacio, se gana en las vistas del entorno. Los desarrolladores trataron una docena de diseños diferentes antes de decidirse por reducir la parte delantera. "Definitivamente tenemos compradores que les gusta y compradores que no", cuenta Kevin P. Maloney, el fundador de Property Markets Group, la desarolladora que lo lleva a cabo junto con Madison Equities.

Sólo unas pocas cuadras al sur, cerca de donde comienza la Avenida de las Américas, la empresa DDG está trabajando en dos lotes triangulares, ambos entre las calles Franklin y White, que fueron comprados por US$ 9,5 millones. Eso es lo que cuestan algunos lofts en Tribeca actualmente (no un edificio entero) y es fácil adivinar por qué. Las parcelas, una de 11 metros de ancho y la otra de 8 metros en su punto más extenso, pronto alojarán un complejo de 10 nuevos departamentos y tiendas, que se llamará Franklin 100.

Si el edificio de Sullivan celebra su sitio en forma de cuña, Franklin lo oculta y lo muestra en igual medida. Mirando al norte, se asemeja a un típico edificio de lofts, con grandes ventanas empotradas en una fachada de ladrillo con dibujos (una especialidad de la firma DDG). Pero visto desde el otro extremo, es evidente que la fachada se estrecha formando una punta ceñida antes de desaparecer en el edificio de al lado. Un muro de contención arqueado forma un portal para un local comercial y parece sostener a gran parte del edificio desde lo más alto.

Los dos lotes se encuentran en sus esquinas opuestas de una manera que hacía inviable conectar los interiores. Por lo tanto, DDG creó dos edificios que parecen uno, unidos por una pared de ladrillos estampados. Al igual que en casi cualquier proyecto en la ciudad, el código de zonas es altamente prescriptivo y por lo tanto responsable, tanto como los arquitectos, de la estética de un edificio. Como en este caso el código requiere una fachada sin interrupción a lo largo de ambas avenidas, Joe McMillan, director ejecutivo de DDG, consideró que estas tierras eran las más adecuadas. "¿Dónde más podría conseguir 61 metros de frente ininterrumpido en una avenida principal en estos días? Y con todas estas calles convergentes, lo que nos da más luz y mayor visibilidad”. Afirma McMillan y concluye: "Realmente, esto significa transformar una limitación en una ventaja".

Incluso a pesar de su complejidad, existe una competencia considerable para muchos de estos sitios extraños. En un viejo estacionamiento próximo a la Academia de Música de Brooklyn en la avenida Flatbush, Two Trees Management está construyendo una torre de 32 pisos que hasta ha sido llamada "el Flatiron" de ese barrio. En Harlem, un proyecto sobre Frederick Douglass Circle, en el extremo noroeste del Central Park, fue vendido por el ayuntamiento después de que muchos desarrolladores hicieran una oferta.

Denominado Circa, el complejo de 48 condominios tiene un diseño más convencional, según se ve desde la calle. La mitad de la propiedad quedó abierta para crear una V (más que un triángulo) lo que permite que las unidades sean más largas y con vistas al parque. Para que los espacios interiores fueran menos conflictivos, se añadieron balcones en su tramo final, sobre la calle 110. "Muy rara vez se hace una curva o un arco en un edificio en Nueva York, por eso quería crear una presencia real en el Circle y el parque", dijo Dan Kaplan, socio senior de FXFowle Arquitectos.

Los edificios "en picada" de la ciudad, creados por Frank Gehry y Zaha Hadid tienden a ser glorificados. A diferencia de las geografías torcidas de San Francisco o París, donde el estilo del Flatiron abunda, Nueva York es más reticente a los espacios estrechos. Robert Stilin, un diseñador que trabaja en un departamento del último piso del 10 Sullivan, confiesa: "Realmente no me encantan los ángulos o arcos, aunque tienen sus ventajas". Y agrega: "Uno tiene que crear sus propias simetrías."
Fuente: http://www.tusmetros.com/site/noticias/noticias.php?id_noticia=24385